Where shall we begin?

We read the script of a play and analized it. It was about an interview between Paul Faustino and Gato, a very famous goalkeeper. In groups we needed to make an script and perform it. I made it with Aylén, Emilia, Sol and Violeta.

Combien il coûtent?

Luego de mirar un video sobre un señor comprando ropa en un local, tuvimos que hacer nuestro propio video en grupos o parejas. Yo lo hice con Emilia sobre una zapatería. Yo soy la vendedora y ella la clienta.

What is the League of Nations?

We studied about the League of Nations. Then we made a mind map about it. This is my mind map.

If you find it difficult to see it, here you have the link.

Reino metazoo

En clase, Andrés nos enseñó sobre el reino metazoo y construimos un cuadro. Le agregamos imágenes en grupo para ver cómo era cada especie. Yo lo hice con Aylén, Emilia, Joaquín, Gastón y Santiago.

Si te es difícil verlo, aquí tienes el link. 

¿Y mi mejor amigo?

Luego de leer "El cuentista" de Saki, tuvimos que crear un cuento inapropiado en grupos. Yo lo hice con Aylén, Celeste y Lucía.

¿Y mi mejor amigo?

Era un día soleado, las mariposas volaban por todas partes y la primavera trajo flores de todos los colores… O, así querrían que empiece la historia. Les advierto, esta no es una historia en la cual los niños se ríen y el final termina con un arcoíris. Si ustedes quieren una historia con mariposas volando y flores por todas partes, cierra este libro y no lo vuelvas a abrir jamás. Esta es una historia que relata la vida de James Scamander, y como trata de salvar la vida de su mejor amigo.

- Xander… Xander… ¡XANDER! – Dije

- ¡¿Qué?! – Me gritó Xander

- ¿Qué haces? – Pregunte de forma inocente.

- La tarea de Biología… ¿Tú, James Scamander? ¿La hiciste? –

Mi cara fue épica. Si no le entregaba alguna tarea más al profesor Wilson, tenía las posibilidades de llevarme la materia y no ir al concierto de los Rolling Stone; el último concierto que iban a hacer antes de jubilarse. ¡Mi última oportunidad! Llevaba meses ahorrando para ir.

- ¡¿Qué voy a hacer!? – Pregunté desesperado.

- Tranquilízate… ¿Al menos sabes que hay que hacer? – Respondió mi mejor amigo.

Lo pensé por algunos segundos.

- Nop. - Conteste acentuando la “p”. Xander estuvo a punto de pegarse la cabeza contra el banco, pero se contuvo.

- SOLO, por esta vez podés cambiar las palabras de mi trabajo. ¡Pero solo ESTA vez! –

Mi mejor amigo Xander Wellington (Si un nombre medio, bastante raro. Aunque, el mío no es muy común que digamos) me salvaba desde que tengo memoria. Cuando me tropecé con la mochila de Bruce “El Bravucón” o cuando mi perro Coco Bot se escapo de mi casa; Xander lo busco por tres días para no verme triste. El mejor amigo que jamás pude pedir. Nos metemos en problemas juntos, hacíamos la tarea juntos ¡Hasta nos castigaban juntos! Éramos inseparables.

Después de que mi mejor amigo me “ayudara” con la tarea, mi profesor se sorprendió al ver que mi hoja estaba escrita. Y al terminar las clases volvimos a casa juntos como todos los días.

Bueno, hasta ahora vieron que mi vida es normal. La vida normal de cualquier adolescente de 16 años. Con amigos, vida social y un perro. Pero, aquí las cosas se empiezan a complicar y poner raras. ¿Saben que es un deja vú? Bueno, yo viví algo parecido, pero diez mil veces peor. Porque yo termine en un loop. Era vivir el mismo día varias veces.

Al día siguiente 25 de septiembre…

Satisfaction de los Rolling Stones, anunciaba un nuevo día. ¡¿Alguien me puede decir quién inventó, esa cosa llamada colegio?! ¡¿A quién le importa cuando murió George Washington!? ¡Ya está muerto! Sin embargo, no importa cuánto me quejara de que el colegio es una inútil pérdida de tiempo. Tenía que ir. “¡Yupi, otro día de colegio!”.

Ya en clases, estaba molestando a Xander; tirándole bolitas de papel. Cuando la profesora Manchester, con las cejas fruncidas, su nariz más puntiaguda que el pico de un tucán y sus labios pintados de color carmín. ¡Toda una bruja! Solo le faltaba la escoba y el sombrero.

- Buen día – Exclamó la profesora, con poco interés. – Hoy vamos a hacer trabajos en parejas.

A Xander y a mí se nos iluminó la cara. Trabajo en parejas significaba juntarse a jugar al Call of Duty y terminar la tarea a último momento.

- Con parejas que yo elegí. – ¡Nos miró directamente a nosotros cuando lo dijo!

Adiós al “trabajo” en pareja con Xander. Después de que la profesora Manchester, me pusiera con Wendy y a Xander con Sarah. Se pudrió todo. Seguramente se estarán preguntando ¿Qué pasó? Bueno, eso ni yo lo puedo explicar. Esta parte de la historia me sigue pareciendo confusa. No importa cuántas veces trate de pensar algo razonable, nada se me ocurre. Todo ocurrió muy rápido. Lo único que sé es que… La ventana se rompió. Una pelota entró con una fuerza sobrenatural volando y todo el mundo quedó en shock.

Minutos más tarde de este suceso. Después de que todos nos dimos cuenta que estábamos en shock y una persona, que era mi mejor amigo, estaba tirada en el piso. La profesora reaccionó. Algunos empezaron a gritar. Yo, no sabía cómo reaccionar. Lentamente me acerqué al cuerpo inerte… en mi cabeza todo se detuvo. Xander Wellington, estaba muerto. Y no pude hacer nada para evitarlo.

Volví a mi casa, y lo único que hice fue llorar hasta quedarme dormido…

Un día más. No tengo ganas de nada. ¿Cómo voy a sobrevivir sin Xander? El era como ángel guardián al que podía molestar las veces que quería.

Estaba tan deprimido que no me di cuenta que “Satisfaction” de los Rolling Stone estaba sonando otra vez; aunque todos los días sonaba una canción distinta.

Me pareció raro que mis padres no me detuvieran para ir al colegio. Estaba seguro que se habían enterado que sucedió. Todo el mundo se enteró. Pero lo más raro ocurrió después, cuando llegué al colegio… ¡Estaba ahí! ¡Xander estaba VIVO, sentado justo frente a mis ojos! ¡¿Cómo?! Lo único que sé, es que lo abracé con todas mis fuerzas. Como si este fuera un sueño del cual no quería despertar.

- ¿Yo también te amo? – Reaccionó Xander, a mi asfixiante abrazo. Por lo cual llegué a la conclusión que todo fue un sueño. - Te estaba guardando el lugar… -

Estaba a punto de sentarme con él, cuando me acorde la profesora Manchester, iba otorgarnos un trabajo en grupos. Bueno, en realidad no estaba un cien por ciento seguro de aquello, pero tenía un presentimiento. Sin embargo aunque, nos sentáramos por separado la profesora eligió los grupos… así que finalmente opté a sentarme con Xander.

- Buen día – Exclamó la profesora, con poco interés. – Hoy vamos a hacer trabajos en parejas. ¡Ja! Exactamente como lo predijo mi sueño. - Con parejas que yo elegí.

Como en mi sueño, yo termine con Wendy y Xander con Sarah. Lo único que cambió fue que, convencí a Xander de sentarse en otro lugar. Por si lo de la pelota se volvía a repetir…

Sin embargo, no ocurrió lo de la pelota. Esta vez cayó un piano de la sala de música que se encontraba arriba de nosotros. ¿Cómo paso? Bueno, eso ni yo lo podría explicar. Lo único que sé es que, Xander Wellington fue el único que volvió a morir en esa habitación y yo era el único que se acordaba que se había muerto antes. En ese mismo instante, me percaté que la fecha en el pizarrón era exactamente la misma que la de ayer. Es decir que yo volví a revivir el mismo día otra vez. ¿Cómo? No lo sé. ¿Qué aprendí? Nada… solo pensé que había dos opciones. La primera fue; para parar esta locura, tengo que salvar a Xander. La segunda opción fue; no tengo escapatoria y no importa que cosas cambie, Xander va a terminar muriendo y yo me voy a terminar volviendo loco.

¿Adivinan cuál fue la opción correcta? ¿Qué pasó después? ¿Qué aprendí al final?

- ¿Qué pasó al final? – Preguntó el joven guarda

- Al final, no pude salvar a Xander. No me acuerdo cuando me di cuenta que me había vuelto loco cuando Xander se mudó y no estuvo ahí para consolarme cuando mis padres se murieron. No me di cuenta cuando Xander pasó a estar muerto en mi cabeza – Tomé un largo y sonoro respiro.

Al final Xander murió de más de mil maneras diferentes. Aplastado por un piano, picado por una araña, caerse en un pozo y un montón de otras maneras absurdas de las cuales muchas no me acuerdo. Eventualmente, no supe cómo manejar la situación. Si le contaba a alguien o trataba de ayudarme, al siguiente día se olvidaba o me tomaban por loco. Si trataba de irme o mudarme, al día siguiente despertaba nuevamente en mi cama para volver a ver a mi mejor amigo morir.

Lo que nunca supe fue que afuera de mi mente la gente que me veía y me escuchaba no se preguntaba si estaba loco. Lo daban por hecho. En mi mente todos los días tenía 16 años sin importar los años que pasaban. En la vida real yo envejecía y maduraba como todos los demás. Terminé en este loquero. ¿Cuándo me di cuenta donde estaba? A los 60 años; hace ya 15 años estoy varado en este lugar sin que nadie me venga a visitar y poder charlar para pasar un buen rato. Soy un viejo de 75 años al que nadie quiere y con historias aburridas para contar, que solo pasaron en mi mente.

- ¿Aburridas? - El joven guarda se veía sorprendido – Aburrido, es tener que ir a trabajar todos los días solo para que te paguen lo mínimo, sin importar tu esfuerzo.

- ¿Eso es lo que piensas de la vida? – Le respondí riendo. – Tú puedes salir cuando quieras a donde quieras. Tú puedes comer un rico helado y pasar tiempo con tu familia y amigos. ¿Te cuento un secreto?

- ¿Un secreto? –

- Después de la vida, lo más importante es tu libertad. Disfrútala. Sin importar las cosas malas que pasen, porque nada es para siempre. Ya que no importa que tan mala se vuelva la vida, no vas a poder volver al pasado para cambiarla. -